Ya han pasado nueve días desde que comencé el tratamiento,me siento mas cansada , pero tengo que seguir luchando. Recuerdo el primer día ,me hicieron desnudar , ponerme una bata azul y me indicaron la sala de "aislamiento" ,seguí a la enfermera con total fijación ,no quería perderla. La sala es fría , muy fría, pero con música,algo es algo pensé. Siempre me ha gustado la música desde las nanas que mi madre me cantaba cuando era pequeña hasta los destrozos que hacían mis hijos con el violín . La música , según la definición tradicional del término, es el arte de organizar sensible y lógicamente una combinación coherente de sonidos y silencios utilizando los principios fundamentales de la melodía, la armonía y el ritmo, mediante la intervención de complejos procesos psico-anímicos.
En la primera sesión ,recuerdo que cantaba Amaia Montero con su voz dulce y armoniosa me ayudo a pasar mas brevemente el tiempo ,en los días posteriores pasaron desde Malú con su nuevo disco Blanco y Negro hasta música de Samba , la verdad es que me hizo mucha gracia entrar al "bunker" y tener ganas de mover las caderas, solté una carcajada y Concha (así se llama la enfermera que me acompañaba) me miró extrañada y dijo: Menuda música nos han dejado esta tarde ,no te preocupes le conteste ,lo malo es que no pueda resistir el estar inmóvil en mi sesión ,pero prometo intentar no mover las caderas.
Yo también estoy en un coro y desafino por momentos ,se muy bien lo que cuesta ejecutar las notas ,pero me gusta la música.
¿Alguna vez has pensado como suena el cáncer?